Que las familias se vuelvan
a unir, que los amigos se
vuelvan a encontrar, que las
personas se puedan abrazar
y que lo único contagioso
sea la felicidad.
¡ Te lo suplicamos Señor !
Perdonanos Dios Padre, porque muchas
veces pensamos que te olvidas de nosotros.
Pero no nos ponemos a pensar cuantas veces
nos hemos olvidado de ti.
Ningún obstáculo es demasiado
grande si confiamos en Dios.