LLEGAR A VIEJO
Hoy meditaba y pensaba en lo triste que es llegar a viejo
cuando sentado me quedé mirando hacia la nada
al ver los pasajes en mi memoria como una película...
Mis hijos crecieron forjándo sus metas
subiéndo peldaños hasta realizar sus sueños
formándo cada uno su propia familia.
Mis nietos nacieron,
mis hijos entre sus brazos los sostuvieron
enseñándole a cada uno de ellos
a dar sus primeros pasos,
a decir sus primeras palabras
y a decir sus primeras frases entrecortadas
aún tenía fuerzas y los cargaba siempre entre mis brazos.
pero todo ha cambiado...
Hoy se hizo un gran nudo en mi garganta
al ver lo triste que para muchos es llegar a viejos.
La vida no perdona...
a los viejos los pasos se nos van volviendo lentos,
a algunos comienza a fallarles la memoria,
pero el amor de sus hijos,
ese jamás se nos olvida
solo se nos queda guardado
el amor de cada uno de ellos en el alma
donde algunas veces ya no vuelven los recuerdos.
Donde nada de lo que se vive se recuerda,
donde solo quedan vagas o hasta ninguna laguna.
El tiempo se vuelve cortina de humo
donde se esparce
y se diluye por un camino donde ya pesan los años.
donde a algunos quedan abandonados,
donde a otros los maltratan,
a otros los olvidan y a otros los rechazan.
...Y ellos entre el desconcierto y la tristeza
atrapados se quedan en su propio mundo
donde sienten pena por volver a ser como los niños,
donde quedan secuelas de los años vividos
secuelas que se hirán con ellos
hasta el último día.
Hoy yo que soy un viejo,
se me hace un gran nudo en la garganta
al querer expresarle al mundo
para que escuchen y entiendan
y que nunca olviden que a todos en algún momento
la vida y los años nos alcanzan.