Educar a un niño es una tarea hermosa, pero muy desafiante a la vez. Ser padre o educador requiere paciencia, dedicación y habilidades. Pero utilizando correctamente las técnicas de refuerzo positivo, es posible estimular el aprendizaje de nuestros pequeños.
Preservar y cuidar de la integridad física, intelectual y emocional de nuestros pequeños, es indispensable para educarlos con amor y valores.
Tenemos que entender, antes de nada, que los niños aprenden mirándonos. Es decir, construyen su propia personalidad y basan sus conductas en los ejemplos que demuestran los adultos de su entorno.
Muchos niños reciben una crianza disfuncional, con afectividad deficiente y valores ausentes. Y ello les genera un vacío enorme y muy difícil de superar en la vida adulta.
Cargando...
frases para educar con amor.
Te quiero
Es la frase más sencilla y la más verdadera declaración de amor que un niño puede recibir. También ayuda los adultos a recordar la importancia de ser sinceros con sus propios sentimientos.
Eres tan guapo
Un niño debe sentirse seguro con su apariencia física para poder desarrollarse sanamente y no crear complejos. Elogiarlo diariamente e incentivarlo a cuidar de sí mismo son excelentes para reforzar su auto estima.
Yo confío en ti
Los niños que desarrollan miedo a decepcionar sus padres y fracasar son inseguros y suelen presentar problemas de aprendizaje y sociabilización. Es muy importante que el niño entienda que tiene nuestro apoyo y confianza para expresarse y descubrir nuevas experiencias.
Me encanta tu compañía
Reservar un tiempo dedicado a tu hijo y disfrutar de su compañía es esencial para una vida familiar saludable. Y claro, es indispensable demostrar cuanto aprecias estar con él.
Hacemos la comida juntos
Integrar gradualmente el niño a las tareas hogareñas es parte de educar con amor y en valores positivos. Ello le enseñara a compartir, asumir responsabilidades y trabajar en equipo lograr un mejor resultado. También es una buena oportunidad para enseñarle sobre los alimentos y estimular una alimentación más saludable.
¿Cómo te fue?
Demostrar interés y empatía hace con que el niño se integre, quiera participar y contribuir para el ambiente familiar.
¿Nos lavamos los dientes juntos?
Ya hemos visto la importancia de incentivar los hábitos saludables, como la higiene personal y los cuidados hogareños. Una buena forma de enseñar al pequeño a cepillarse los dientes correctamente es compartir con él este momento.
Por favor y gracias.
Las palabras y gestos de buena educación y conducta respetuosa deben ser aprendidos en el hogar. Por ello, tienen que estar presentes en el día a día del niño y ser incentivadas por los adultos más cercanos. Es importante no olvidar que somos los espejos de nuestros hijos, nietos, y alumnos.
Para educar con amor no hace falta que nos impongamos una rutina de manifestaciones de cariño ni nos condicionemos, todo se trata de no retrasar o esconder las expresiones, los gestos y lo mejor de nosotros mismos.
Que ganen los «te quiero» a los «no grites», «no hagas», «no toques»
Cargando...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario