Si aún no sabes qué tonalidades son las que mejor te sientan, ¡atenta! La rueda cromática te desvelará como jugar con los colores de una forma adecuada.
1 La rueda cromática.
¿Debo combinar las sombras con lo que llevo puesto? ¿O según mi piel? ¿Y debo tener en cuenta el color de mi cabello? ¡Que hago! Desde luego estos pueden ser parámetros adecuados a la hora de elegir tus sombras pero como seguro nunca te equivocarás es escogiéndolas en función del color de tus ojos. Sabiendo qué tonos utilizar conseguirás resaltar tu mirada.
Para empezar no viene mal tener algunos conceptos sobre colorimetría. Todos los colores del espectro luminoso se clasifican en la llamada rueda cromática. En ella podemos encontrar los colores primarios y los secundarios. El amarillo, el azul y el rojo pertenecen al primer grupo y son los tonos básicos porque no se pueden obtener de la mezcla de otros colores. Los secundarios, sin embargo, se logran a partir de la mezcla de los primarios. Son el naranja (que resulta de añadir amarillo al rojo), el verde (que se forma uniendo el amarillo y el azul) y el violeta (que se logra de la fusión del azul y del rojo).
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2 Jugar con los colores.
¡Ya estás lista para hacer combinaciones! Es obvio que no vas a utilizar sombras amarillas o rojas como tal pero sí puedes usar tonalidades que se incluyan dentro de la misma familia. Así debes saber que cualquier color secundario combina a la perfección con cualquiera de los primarios por los que está compuesto.
Otra combinación muy buena es la de los colores complementarios. Éstos son los que se encuentran opuestos entre sí en la rueda cromática. Así es el amarillo va con el violeta, el azul con el naranja y el rojo con el verde. Siempre debes colocar el color más claro o apagado en el párpado móvil mientras que el más llamativo irá en el fijo.
También puedes optar por utilizar sombras de tres colores de la misma gama. En este caso aplica el más claro en el párpado móvil, el de tonalidad intermedia en el pliegue del ojo y el más oscuro e la línea de las pestañas superiores. Elijas la opción que elijas no debes olvidar que la clave está en extender bien las sombras para que se fundan entre sí y no se note donde empieza una y acaban las otras.
3 Ojos de aceituna.
El color verde en los ojos es uno de lo más complicados de combinar. Pero si este es tu caso no te desanimes, ¡difícil no significa imposible! Te quedarán genial los tonos verdosos diferentes al tuyo (musgo u oliva). Eso sí, el delineador negro debe ser tu gran aliado para marcar la línea de las pestañas y el interior del ojo. También te favorecerán los tonos terrosos y marrones, los rosados, púrpuras y los violetas. Para dar un toque de glamour puedes optar también por los bronces y los cobrizos irisados.
Los tonos azules están prohibidos, no sólo porque no habrá contraste sino porque apaga el color de los tuyos. Aunque sí puedes incluir los grisáceos o los negros en degradé con efecto ahumado.
4 El cielo en tu mirada...
Si tus ojos son azules te quedarán estupendas las sombras de color oscuro como el negro o los grises humo, que contrastarán enormemente con la claridad de tus ojos. Además, es un maquillaje ideal para la noche.
Durante el día puedes optar por las sombras azuladas pero jugando con varias intensidades y marcando el ojo con un perfilador negro o azul eléctrico que siempre irá bien difuminado. Los colores caramelo también pueden estar entre tus elegidos e incluso los rosados siempre que no sean muy pastel o demasiado fucsias. Olvídate de los verdosos.
5 ...O la tierra.
¿Tus ojos son marrones? ¡Enhorabuena! Éstos son los más fáciles de combinar. Casi todos los colores te favorecerán, aunque los más adecuados son los verdes en todas sus gamas y también los terrosos y arena te quedarán ideales. Estos últimos intensifican tu mirada y además tendrás un maquillaje muy natural y poco recargado. Aunque tampoco es que te queden espantosos, trata de evitar los azules y los violeta.
6 Ojos de azabache.
El color negro en los ojos crea una mirada profunda y misteriosa. Te sentarán estupendamente los colores claros y los tonos pastel para contrastar con la oscuridad de tu mirada. Así los dorados, los marrones y los rosados deben estar entre tus favoritos. También los vainilla y los beige son una buena opción. Los tonos grises con efecto ahumado te quedarán bien pero ten cuidado de no oscurecerlos demasiado o tu expresión se verá demasiado dura.
Ten en cuenta el color de tus ojos a la hora de completar un maquillaje perfecto tanto para el día a día como para una cita importante.
ADEMAS DE ESTO TE VAMOS A DAR UNOS TIPS PARA PINTAR TUS LABIOS DE FORMA SEDUCTORA.
1- Perfilar el marco de los labios.
Lo primero que hay que hacer es profundizar el marco de los labios perfilándolos con un delineador parecido al tono que vamos a utilizar después. Si tienes los labios gruesos debes marcar la línea por la parte interior, pero si los tienes finos tendrías que optar por delinearlos en la parte exterior para que parezcan más voluminosos.
2-Aplicar 'lip stick' o barra de labios.
Debajo de la línea que hemos perfilado aplicamos un 'lip stick' en lápiz o la barra de labios del color que hayamos elegido, que en este caso debería ser de un tono rojo o semejante.
3- Añadir 'lip gloss' transparente.
Colocamos un poco de 'lip gloss' en nuestra mano para no manchar el bote con el color rojo que ya habíamos aplicado y extendemos una pequeña cantidad con un pincel en el centro de los labios. Así conseguimos mayor profundidad y un resultado muy sensual y seductor.
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